SILBATO, TARJETAS Y BANDERINES PARA LAS MUJERES
No solo jugadoras mujeres, ahora también árbitras y un torneo oficial de fútbol
femenino con la totalidad de mujeres réferi
Son cada vez más las que eligen de profesión el Arbitraje. Cómo siempre, las históricas y luchadoras mujeres, ganan terreno. Este año por primera vez en la historia de la Liga Regional de Fútbol de Río Cuarto, todos los partidos de la primera fecha del Torneo Oficial Femenino “Mercedes Luna”, tuvieron como juezas principales a árbitras mujeres. Agustina Oviedo, una joven arbitra de 22 años, quien debutó en el torneo oficial femenino, nos contó que esa fue una de las experiencias más lindas que vivió dentro de la profesión y quizás una de las mejores; aunque no niega que se le hace muy difícil elegir una sola cosa buena dentro del ámbito arbitraje ya que desde el primer partido supo que esto, para ella, es una vocación y que todo lo que hace desde su lugar es meramente desde la pasión.
Oviedo, es la historia de muchas otras mujeres, de aquellas que luchan por sus sueños día a día, las que hacen mil cosas al mismo tiempo y pareciera que “pueden con todo”; con solo 22 años, es Arbitra Provincial de Fútbol en Río cuarto, estudió arbitraje dos años en la ARAF (Asociación Riocuartense de Árbitros de Fútbol), en lo cuál se esfuerza y prepara día a día para ganar mejor posicionamiento dentro de las canchas, arbitra sábados y domingos;
además, estudia la carrera de produccion y realizacion de diseño audiovisual.
El esfuerzo y la preparación de las árbitras, no solo es teórico-físico, sino también psicológico. Se preparan para -acostumbrarse- a los insultos, hacer oído sordo y disfrutar del juego, como si las palabras que les dedican desde las tribunas fueran poemas de Neruda. Siglo XXI, año 2023 y los insultos dentro de la cancha son moneda corriente, hasta pareciera que si la jueza principal, línea o asistente es o son mujeres se les habilita un repertorio de malas palabras, desprecios y muy malos tratos a las hinchas de género femenino para utilizar contra las réferi: “anda a lavar los platos”, “hija de p*ta”, “¿qué pasa, anoche no te atendieron!?”, entre otras innumerables barbaridades llenas de imaginación. Esto fue lo que complicó el primer partido de Agustina, pero logró rápidamente poder acostumbrarse y empezar a disfrutar del juego sin dejarse llevar por lo que se grita detrás del alambrado… dijo, “en los primeros partidos no me gustaba el tema de afuera, de las cosas que la gente te gritaba o decía, pero después ya me sentí cómoda, hice oído sordo y segui para adelante”.
Agustina Oviedo, Árbitra Provincial de Fútbol en Río Cuarto.
Aunque los insultos son más notorio de mujeres a otras mujeres, los árbitros hombres también se llevan lo suyo, en esta profesión nadie se salva; y como nadie se salva, nadie se queda afuera. Mujeres y hombres tienen las mismas posibilidades de crecer, de llegar a las grandes ligas y de dirigir los partidos más importantes, gracias al sistema de puntos el límite es el esfuerzo, las ganas de aprender y de superarse día a día que tiene cada uno. Si bien los dos géneros tienen las mismas posibilidades, hay que reconocer que los hombres llegan más rápido a debutar en las grandes ligas. El Presidente del Colegio de Arbitros de Río Cuarto, Ariel Gonzalez, dijo: “todavía tenemos una sociedad muy machista en la que, a la parte femenina le cuesta imponerse, entonces bueno, el varón surge más rápido en la carrera, por eso separamos totalmente la parte femenina (haciendo referencia a la liga de fútbol de Río Cuarto) para que tenga su propio torneo, que no haya tanta competencia y
pueda desenvolverse bien”
Hoy en día, la réferi Oviedo disfruta su presente, le apasiona dirigir, se siente muy cómoda y a gusto no solo dirigiendo femenino, sino también masculino cada quince días y juveniles; con estos últimos, los niños, dice que vive momentos únicos por eso le gusta tanto. Agustina, cree que su trayectoria se basa en el esfuerzo, que su meta es seguir adelante y sumando experiencias, por el momento quiere llegar a ser asistente de la primera B y luego de la primera A, pero “todo a su debido tiempo”.
Un llamado anónimo por parte de una réferi al Presidente de la Liga Regional de Fútbol de Río Cuarto, puede que sea un pequeño envión al crecimiento de la mujeres árbitras dentro de ésta liga. El Presidente, Edgardo Camilo Mañez, cuenta que apenas asumió al cargo recibió un llamado inesperado por parte de una arbitra, quien le contó un problema que estaban teniendo las mujeres, un problema de igualdad; a través del teléfono esta persona dijo “los hombres no quieren dirigir los partidos de mujeres por el trato, todo es muy fino, tienen miedo a equivocarse. Entonces, nosotras dirigimos todos los partidos, pero cuando llegan las etapas finales, ¿Qué pasa? dirigen los hombres”.
Mañez le comentó esta inquietud a Ariel Gonzales (presidente del colegio de árbitros de Río Cuarto) y luego de eso se presentó la idea de que el Torneo Oficial de Fútbol femenino sea dirigido en su totalidad por árbitras, esta vez, incluidas las etapas finales. Sumándole a esto la participación en tercera o primera división del fútbol masculino. Al ser la primera vez que el Torneo Oficial de Fútbol femenino se realiza así, con todas árbitras mujeres, va a ser a prueba y error, la idea por parte de la liga es crecer y darle el lugar que realmente se merece el género femenino en esta disciplina. Las oportunidades deben ser para todos iguales, entonces, con este sistema cada uno se va a esforzarse y competir para ganar su lugar en los partidos más importantes, sin importar si son hombres o
mujeres, ya que ambos sexos van a tener la misma posibilidad si los puntos los habilitan.
Este campeonato se puede dar así gracias a que hay cada vez más mujeres ejerciendo esta profesión. Son cada vez más las que eligen arbitrar y se preparan para eso. En Río Cuarto, en el conjunto de todas las asociaciones, hay aproximadamente 30 mujeres, en un promedio de edad entre los 21 y los 28 años.
PARA LA FORMACIÓN: Una carrera profesional
La instrucción la comienza cada mujer en la agrupación que elija y por lo tanto pertenezca. En la Liga Regional de Fútbol de Río Cuarto, hay dos asociaciones: ARAF (Asociación Riocuartense de Árbitros de Fútbol) y el SIAAC (Sindicato Independiente de Árbitros Asociación Civil). Cada agrupación tiene sus instructores, se comienza dando como base el reglamento de fútbol, el cual se compone por diecisiete (17) reglas más todo los artículos que da AFA
(Asociación del Fútbol Argentino) por diferentes motivos como por ejemplo: suspensión de partidos. Una vez que se desarrolla y aprueba el examen teórico pasan a la parte física. Para poder realizar las actividades y el trabajo de campo deben tener aprobada la aptitud física y deben haber presentado el SMAC (Servicio de Mediación, Arbitraje y Conciliación, el cual es un recurso óptimo para evitar que el trabajador deba acudir a la jurisdicción ordinaria
a reclamar sus derechos). Trabajo de campo se le llama a aprender y practicar los distintos movimientos que deben realizar asistentes, líneas y/o árbitros dentro del campo de juego. Una vez aprobado esto, comienzan a dirigir en las divisiones inferiores las cuales juegan los días Sábados.
Una vez que obtienen el título de Árbitras Provinciales no se termina el proceso de formación, ya que durante su carrera seguirán rindiendo exámenes teóricos-prácticos y estarán en constante aprendizaje; además de enterarse dos o tres veces a la semana según el instructor de su asociaciones predisponga.
Agustina Oviedo, árbitra Provincial de Fútbol de Río Cuarto, perteneciente a la ARAF dirigiendo un partido de juveniles.
UN REPASO POR LA HISTORIA: Más de 25 años de lucha.
Hace exactamente 25 años atrás, un 4 de Abril de 1998, una mujer debutó por primera vez en la historia del fútbol argentino en un encuentro profesional, ella era Florencia Romano. El camino de Romano comienza unos años antes de del ́98, cuando su mamá decidió anotar en una escuela de modelaje y Florencia semanas después la abandonó y se metió al colegio de árbitros. En 1992, recibió su título y empezó a dirigir la liga local de Tucumán ya
que ella es oriunda de allí; al no tener el apoyo del Presidente del Colegio de Árbitros de esa provincia, en 1994 emprendió viaje a Buenos Aires, donde pudo seguir estudiando esta profesión y obtener su segundo título en 1996. Luego de esto, quiso incorporarse a la nómina de árbitros profesionales de la AFA (Asociación del Fútbol Argentino) pero la institución que tenía como principal dirigente a Julio Grondona, no respondió. Entonces,
Florencia, a modo de protesta por la discriminación laboral, hizo una huelga de hambre frente a la sede de Viamonte, Buenos Aires. Grondona, como presidente de la AFA, respondió “no es sensato que una mujer dirija un
partido de fútbol”.. fue por esos dichos que se lo convocó a una audiencia en el Congreso de la Nación para que explicara sus dichos. Luego, gracias a la presión pública y judicial, la lucha de Romano dió sus frutos y es así que ese 4 de Abril de 1998 Florencia Romano se convirtió en la primer mujer en dirigir un partido profesional en el fútbol Argentino
Pagliano Giraudo, Rocío