El villamercedino que triunfó a más de 9000 km de distancia

El adolescente Juan Pablo Andrada, apasionado por el pádel, obtuvo los primeros puestos en el campeonato panamericano y en el mundial “Open de menores” en Tijuana, México.

En un banco de la plaza y todavía con su uniforme escolar, Juan Pablo Andrada expresaba su amor por el pádel, entre risas y una buena charla. Aunque aparente ser un adolescente normal, su disciplina y constancia lo llevan a pasar largas horas en la cancha. Su vida se disputa entre ser un deportista profesional de pádel y ser uno más entre sus amigos y compañeros del colegio. Es el orgullo de su familia, a quienes considera su mayor inspiración al momento de competir; ahora también es el orgullo de Villa Mercedes y de todo el país, debido al gran logro que consiguió junto al equipo de la celeste y blanca. Lo que comenzó como una herencia familiar lo llevó a ser campeón del mundo, su camino recién comienza y aún tiene un largo futuro deportivo por delante.

-¿Cómo llegaste al pádel y por qué decidiste jugarlo?

-Juego al pádel hace aproximadamente 10 años, y lo elegí porque en realidad es una herencia familiar, ya que yo llegué al pádel por mi papá pero él empezó a jugar influenciado por mi abuelo -dijo sonriente-. Decidí empezar este deporte porque cuando era chico estaba dudando si empezar a jugar al fútbol o al pádel, pero al final decidí empezar pádel ya que me gustó mucho más el ambiente; personalmente me gusta mucho la gente que está dentro el ambiente del pádel, y los buenos amigos que haces gracias al deporte, tengo amigos por toda Argentina, y yo sé que si tengo que ir a un torneo en Buenos Aires o Córdoba, seguro tengo ahí algún amigo o alguien de confianza, que si necesito algo me va a dar una mano.

-¿Qué significa el pádel en tu vida?

-En este momento lo estoy viendo como una profesión ya que son muchas horas de entrenamiento y espero que en el futuro pueda considerarlo como un trabajo al que me pueda dedicar sin interrupciones. Ahora se me complica dedicarme completamente al deporte, porque estoy en el último año del secundario y por ahí es difícil, aunque ahora, con la virtualidad, trato de cumplir con las tareas lo mejor posible, lo bueno es que este es mi último año, entonces, el año que viene quiero dedicarme completamente al pádel y probar suerte en el circuito profesional de Argentina. Y aunque el pádel sea mi principal objetivo a largo plazo, también tengo en mis planes empezar a estudiar Ingeniería en Sistemas cuando termine el secundario -agregó-.

-Con respecto al campeonato en México ¿Cómo viviste esa experiencia?

-Para mi viajar a México fue algo totalmente impensado, y puedo decir que fue la mejor experiencia de mi vida hasta el día de hoy, todavía no caigo, fue como tocar el cielo con las manos -dijo con emoción-. Fue una total sorpresa, ya que la selección eligió jugadores jóvenes para que adquiramos experiencia internacional y al final nos terminamos llevando los primeros puestos. Con respecto al recorrido, lo pude que transitar junto al equipo que representa a la Selección Argentina, y con mi compañero Facundo López; nosotros habíamos jugado un torneo clasificatorio en julio donde terminamos como pareja numero 3 y eso nos dio la clasificación al panamericano y al torneo mundial.
Entonces a fines de agosto viajamos y estuve hasta fines de septiembre en México, todo ese mes allá fue la mejor experiencia de mi vida hasta el momento. En el panamericano, junto con Facundo ganamos 4 de los 5 partidos que disputamos, en la final competimos contra Uruguay, ganamos 3-0 y nos llevamos el primer puesto. Tres semanas después yo jugué el mundial en el “Open de menores”, pero ahí me presente solo, donde pude llevarme el titulo de campeón del mundo por parejas con el primer puesto, fue la primera vez que me tocó representar a la Selección y vivirlo así me dio una satisfacción tremenda y también una gran alegría–dijo entusiasmado-. Cuando volví a Villa Mercedes me di cuenta de que compartía esa alegría con mas personas, no solo cercanos, sino gente del ámbito del pádel que fueron a recibirme, hicimos caravana con todos los chicos que estuvieron en el preseleccionado, lo cual a mi me genero una alegría muy grande, fue muy lindo el recibimiento de la gente.

-¿En qué tipo de competencias participas? ¿Cuál es la mejor parte de competir?

-En este caso participe en el último año de las selectivas de menores que me hacían clasificar para el mundial y para el panamericano. Pero yo ya terminé esa etapa porque ya cumplí 18 años y ahora paso al ciclo profesional
argentino. También compito en los torneos locales de acá de Villa Mercedes, en torneos nacionales, provinciales y
ahora también mundiales. Siguiendo con la pregunta, para mí la mejor parte de ir a competir es la gente, ya que a veces vas a muchos lugares distintos y vos no conoces a nadie y la gente no te conoce, pero al fin y al cabo te reciben muy bien y pasas muy buenos momentos.

-¿Cuáles son las próximas competiciones en las que te gustaría participar?

-En mi caso pertenezco a primera categoría, por lo que me gustaría participar en los próximos torneos nacionales, en los AJPP (Asociación de Jugadores Profesionales de Pádel) que es en dónde juegan los mejores de Argentina y
medirme contra los mejores del país. También hay una chance de ir a competir España con mi hermano Marcos lo
cual sería un gran logro personal y una emoción enorme, ya que tengo muy buenos recuerdos con él -comentó-
tengo una experiencia nostálgica y emocionante, que fue cuando jugué mi primer campeonato nacional, que antes
de este mundial fue mi mayor logro -aclaró-, y lo gané justamente con mi hermano. Fue el único torneo que jugamos juntos y bueno, justo se dio la casualidad de que fue toda nuestra familia a vernos y fue muy emocionante-

-¿Tenés alguna inspiración?

-Si tengo, mi inspiración es el apoyo de mis papás -dijo con brillo en sus ojos- ya que ellos hacen un gran esfuerzo
siempre, tanto en lo económico como en lo personal, siempre están para mí y es lo que más me importa en el
momento de entrenar. En el momento de competir cuándo por ahí me desanimo durante un torneo, empiezo a
pensar y digo “no, tengo que seguir, no puedo tirar este partido, no puedo rendirme; tengo que luchar y tengo que
hacerlo por ellos que son mi mayor inspiración”.

-¿Consideras o sentís que has tenido que sacrificar o dejar de lado algunas cosas por dedicarte al deporte?

-Sí, lo que más he sacrificado son las juntadas tanto con amigos como con familiares, me he perdido muchos eventos por asistir a los entrenamientos y a los torneos. Aunque también tiene que ver con cuán importante es el
entrenamiento y cuán importante es la juntada o la persona que organiza, por lo que me voy acomodando de la
mejor manera para intentar estar lo más posible en esos encuentros pero no siempre es posible, ya que tengo que
entrenar muchas horas y eso me impide ver a la gente que amo.

-¿Crees tener una vida de adolescente normal?

-Creo que sí, pero ahora que lo pienso mejor depende de la época, ya que ahora a fin de año tengo muchos torneos, en esta época no puedo salir, tengo que entrenar más y tengo que estar más concentrado en el deporte y al mismo tiempo encontrar un equilibrio para estar al día con la escuela. Pero ya cuando termina el verano y que todo está más tranquilo se podría decir que si tengo tiempo para juntarme con mis amigos y para disfrutar del tiempo libre.

-¿La pandemia afecto en algo tu carrera?

-Me afectó bastante cuando se paró todo ya que dejé de entrenar, dejé de competir y encima yo llevaba una buena
racha antes de que empezara la pandemia, y bueno, cuando se cortó todo bajé el nivel que tenía y no podía hacer
nada para remediarlo, ya que por ahí estaba más arriba en los puntajes que otros chicos o les iba ganando y me
pasaban o alcanzaban por no poder entrenar ni competir. Por lo tanto perdí un poco la motivación y la confianza que me tenía, fue difícil dejar todo de lado, pero cuando pude volver a entrenar lo hice con todas las ganas para estar igual o mejor que antes de la pandemia, ya que sabía que tenía que viajar a México entonces entrenaba 4 horas por día con la intención de llegar lo mejor posible al torneo, fueron muchas horas, pero al final mereció la pena.

-¿Si tuvieras que darle un consejo a alguien que está por empezar cuál sería?

Les diría que el pádel es un deporte que se puede jugar siempre, hay jugadores que ahora están en la élite y que han empezado a jugar con 18 o 19 años por lo que no es necesario arrancar a practicar el deporte desde los 8 años como yo para ser bueno, por lo que considero que nunca es tarde para empezar a entrenar y competir; además, también le diría que hay que ser constante en los entrenamientos y tener mucha disciplina. Yo siempre trato de mantenerme y no decaer, intento estar concentrado y seguir adelante, eso por ahí me falla un poco –aclaró entre risas-, ese es mi objetivo a nivel personal. Como te digo, yo no me esperaba esto de los resultados en México cuando salí campeón, y clasificar para esos torneos tampoco me lo espere, pero bueno, me llegó y creo que es gracias al esfuerzo y la disciplina que al final me termina motivando y da mucha satisfacción.

-Y a vos ¿De quién te gustaría recibir un consejo?

-Me gustaría recibir un consejo de Fernando Belasteguín que es la leyenda máxima del pádel, es un crack; él tiene 46 años y sigue estando allá arriba, es decir, jugando de igual a igual con pibes de 20 o 21 años; es un hombre que se mantiene y que tiene una mentalidad distinta a los demás, a mí me parece que eso es algo muy difícil y me
sorprende mucho, así que me gustaría recibir un consejo de él, qué es el máximo ídolo de todos.

Entrevista realizada por Naara Guzmán.

Naara Belén Guzmán Páez

Estudiante de Comunicación Social, UNRC.

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